Hoy os ofrezco la última entrega del proceso de construcción de mi propio tambor militar histórico. Podéis ver la primera parte AQUÍ, la segunda AQUÍ y AQUÍ la tercera.
Para refrescar la memoria, este es el estado del tambor en la última entrada:
Fabriqué unas orejetas (“apretones” en la tradición asturiana), que sirven para tensar la cuerda del tambor. Utilicé el mismo procedimiento y materiales que describí en “Restauración de un tambor militar“. El resultado fue este:
Encargué unos parches de piel de cabra montados sobre arillos de madera a Baena Sonido (más grueso el batidor, más fino el resonante). Con unos 20 m de cuerda de cáñamo de 5mm de grosor y mucha paciencia encordé el tambor:
Aquí se ve claramente una orejeta y el remate al acabar el encordado. En la tradición inglesa y estadounidense se llama “pig tail” (“rabo de cerdo”) y es la forma en que históricamente se ha hecho ese nudo.
Hice los bordones con tripa natural que también compré en Baena Sonido. Los humedecí hasta que se volvieron blandos y maleables y los sujeté al bulón y la bordonera.
Rematé el trabajo añadiendo algunos detalles. Así, añadí un gancho de bronce (“carry hook”) de estilo británico e histórico que compré en Cooperman. Esta pieza sirve para enganchar a la bandolera y poder colgar el tambor. También añadí tres patas de bronce (“legs”) al aro superior (también de Cooperman). Cuando el tamborilero descansaba y descolgaba su instrumento siempre lo apoyaba en el suelo sobre el aro superior, pues del inferior colgaba la cadeneta y podía mojarse y estropearse (debemos tener en cuenta que estos tambores se tocaban al aire libre, sobre suelo natural -hierba, barro, tierra, piedras…-). También en la parte inferior están los bordones y el mecanismo, que son partes delicadas. Por esta razón, el tambor se apoyaba sobre el aro superior pero, para aislarlo del suelo, se colocaban estas patas.
Creo que ha quedado precioso, y os puedo asegurar que suena como un verdadero cañón. Gracias a este tambor (16″x16″) y al otro que restauré (14″x14″) tengo muchas opciones de timbres para tocar música antigua. ¿Os gusta?