El tambor provenzal (tambourin, tambourin provençal, tambourin de Provençe, tambour provençal o tambour de Provençe, que todos esos nombres puede tener en francés) es un tipo de tambor muy antiguo que ya se utilizaba en el medievo. Lo describe Marin Mersenne en el Libro VII de su Harmonie Universelle (1636). Su profundidad suele ser el doble de su diámetro, tiene dos parches, dependiendo de la época en que se haya construido puede presentar o no contra-aros y suele tener un único bordón que atraviesa diametralmente el parche batidor. Digo “suele” porque es tan habitual que el tambourin tenga bordón como que no lo tenga. En un contexto popular el bordón está muy presente, produciendo un “zumbido” que contribuye a crear un efecto de “roncón” (muy habitual en esta música).
La peculiaridad de este instrumento es que un único tañedor (el tambourinaire) lo toca siempre a la vez que el galoubet (una pequeña flauta de tres agujeros).
Esta tradición de tocar un aerófono y un instrumento de percusión a la vez se da en muchísimos lugares de España: Andalucía, Extremadura, Cataluña, País Vasco, Baleares, Castilla y León… También existe en el Reino Unido, Portugal, Francia (obviamente) e Hispanoamérica.
En este otro vídeo podemos comprobar que hasta los grandes se equivocan:
En este otro yo mismo toco la parte con mi tambor provenzal. No dudéis en contactar conmigo si necesitáis el instrumento original.
Hoy hemos conocido un instrumento poco usual en el contexto sinfónico y las obras más importantes que lo incluyen. Tocad este repertorio, por favor, con el instrumento correcto, y si algún director os pone pegas decidle que visite Percusize Me! ¡Os lo agradecerá para siempre!
…et in Arcadia ego.
© David Valdés