David Valdés

Un bombo tamaño familiar.

Retomo Percusize Me! tras mucho tiempo sin escribir. El motivo es que me estuve preparando para la audición de timbal solista en la Ulster Orchestra y tenía que dedicarme en cuerpo y alma a estudiar. He ganado junto a otros colegas la audición y ahora estoy en el periodo de “trial”.
Bombo Leedy. En su momento fue publicitado como el más grande del mundo.
Bombo Leedy. En su momento fue publicitado como el más grande del mundo.
Los días 17 y 18 de mayo toqué con ellos el “Requiem” de G. Verdi bajo la dirección de JoAnn Falletta. El coro fue la unión del Belfast Philharmonic Choir y Codetta. Los conciertos tuvieron lugar en el Waterfront Hall de Belfast y el Millennium Forum de Derry-Londonderry.
 
Estoy seguro de que todos conocéis la importancia que la parte de bombo tiene en esta partitura; pues bien, mi colega Sam Staunton, encargado de interpretarla, se hizo con los servicios del “pequeñín” que podéis ver a continuación:
© David Valdés
Este bombo fue fabricado por Empire Drums, mítica empresa londinense. Hace unos años que cerró, y mucho de su material fue comprado por Bell Percussion (de hecho, recuerdo subastas en eBay poniendo en venta cantidades ingentes de instrumentos cuando el negocio echó el cierre). Este bombo es ahora parte del “backline” de Bell y se puede alquilar. Podéis verlo AQUÍ
 
Mide nada más y nada menos que 66 pulgadas de diámetro (aproximadamente, 1,70 metros). Teniendo en cuenta que un bombo de 40 ya es de tamaño considerable (1 metro de diámetro), os podéis hacer una idea del gran tamaño de este instrumento. Para poder comparar, el Hardtke de la OSPA mide 36 pulgadas.
 
No pude medir exactamente su ancho (no suelo llevar una cinta métrica del sistema imperial en el bolso…), pero es relativamente poco profundo. En esta foto he usado una maza Tom Gauger TG04 para tener una referencia. La maza mide 15 pulgadas y 3/4, lo que nos lleva a que la profundidad del bombo es de, aproximadamente, 16 pulgadas. No nos debe sorprender la poca profundidad en relación con el diámetro, algo muy típico de los bombos ingleses (aún se usan en este país los “gong drums”, bombos de gran diámetro, poco profundos y con un solo parche. Muchas orquestas los siguen usando hoy día, entre ellas la London Symphony). 
© David Valdés
© David Valdés

En las siguientes fotos podéis ver los apliques que sujetan el contra-aro. No son muy prácticos, pues no se puede acceder a ellos desde el frente y se necesita una llave para poder accionarlos. Manipular la afinación es un verdadero engorro.

© David Valdés
© David Valdés
© David Valdés
© David Valdés

Respecto al tamaño del parche, os podéis hacer una idea… No hay vaca en el mundo que tenga tanta piel como para que sea natural (¡necesitaríamos curtir un diplodocus!). El parche es sintético y está hecho a medida por Remo. Incluso este fabricante ha tenido problemas para poder hacer algo tan sumamente grande. En la siguiente foto se aprecia una línea que atraviesa el parche: es donde se juntaron dos láminas de material para cubrir semejante superficie.

© David Valdés
© David Valdés

Comparad el tamaño del sello en los parches Remo de vuetras cajas con el sello que lleva éste… ¡Es casi tan grande como mi mano!

© David Valdés
© David Valdés
El soporte es muy sólido y pesado, y las barras sobre las que se apoya el bombo están forradas con corcho para evitar ruidos.
© David Valdés
© David Valdés
Tiene dos “vent holes” en puntos diametralmente opuestos del casco. También tiene una placa que rinde homenaje a los fabricantes de este instrumento, pero es una verdadera lástima que no especifique la fecha de fabricación. Trataré de ponerme en contacto con Bell Percussion para investigaré la edad de este bombo.
© David Valdés
© David Valdés
© David Valdés
© David Valdés
A pesar de que yo usé un juego de timbales “oversized” (32″, 32″, 29″ y 26″), parecían pequeños en comparación con el monstruo que tenía a mi lado.
 
Este vídeo fue grabado durante el primer ensayo del “Requiem”. El sonido no es óptimo, ya que se usó una cámara doméstica, pero sirve para hacerse una idea.

Por cierto… ¿Os habéis fijado que, incluso para tocar los golpes tutta forza, Sam está sentado? Seguro que eso os recuerda la entrada “To sit or not to seat? He ahí el dilema“.


…et in Arcadia ego.

© David Valdés